enero 26, 2009

Confesiones de una bruta...



En fin... son las 21:56. Está a punto de acabarse un nuevo día, y nuevamente la única imagen que tengo en mi mente es la tuya. Y por algún estupido motivo nuevamente me encuentro esperando alguna señal que me diga que tú haces lo mismo que yo. Me siento extraña. Siento que nada de lo que debiera estar haciendo, está saliendo bien. Estoy a 2 días de desaparecer del mapa por unos días, y en alguna pequeña parte de mi cabecita, me niego a partir y a perder tiempo disfrutando la vida sin saber de ti.

Que bruta!! Que desastrosa yo. Tengo todo lo que necesito para sentirme bien y estabilizar mi vida, pero mis emociones nuevamente me traicionan y tu iamgen vuelve a aparecerse en mis recuerdos, como una maldición. ¿Por qué se me ocurrió la brillante idea de no borrarte de mi vida, de mis contactos, de mis registros, creyendo que podríamos ser los mejores amigos de la vida, haciendo caso omiso de la lucesita que debiera prevenirme de cometer el peor error de la vida? No, en definitiva no sirvo ni siquiera para seguir mis propias ordenes. Y ahí sigues... todavía registrado en mis contactos, con tus fotos a la vista de mis sentidos, hablándome de tus sentimientos como si nunca hubiésemos puesto fin a esta historia... confundiendo mi mundo de forma categórica.

Sí, es mi culpa. Todos dicen lo mismo, y todos tienen la razón. ¿Y de qué me sirve saberlo si por más que lo sepa, y por más que sepa lo que tengo que hacer contigo, no lo haré? No puedo sacarte de mi vida... no puedo, no quiero, no tengo la fuerza de voluntad suficiente. No quiero dejar de hablarte, no quiero dejar de mirarte, no quiero dejarte ir... no quiero!

¿Soy muy tonta? Sï, claro!

Me confundes... no sabes cuanto me confundes. No quiero equivocarme nuevamente. ¿Cómo saber cuál es la decisión correcta? Quiero correr a tus brazos, pero no soy capaz de volver a soportar la distancia. No quiero sentirme insegura nunca más, no quiero sentirte lejos de mí... Quiero tenerte conmigo... pero no puedo alejar a quien me acompaña ahora, quien se ha preocupado de mí todo este tiempo, quien me ayudó a dejarte ir y ha sido mi compañía, mi amigo, mi ayuda, mi amor...

¿Puedo amar a dos hombres a la misma vez? ¿Alguien podría darme una respuesta, o mejor aún, una solución? Puedo amarte a ti, apasionarme por ti, y a la vez amarlo a él... pero no puedo tenerlos a ambos... ¿Cuál es la opción? ¿Cuál es tu opción?
No puedo tenerte... nunca sé si tú vas a regresar, y no puedo esperar más...
Son las 22:32, y sigo pensando en ti...

No hay comentarios:

Publicar un comentario